Sumar ha recuperado el optimismo en estos últimos días. La aprobación en el Consejo de Ministros de por primera vez desde 1983 supone el primer paso para cumplir su promesa estrella de la campaña electoral. Aunque todavía queda un camino parlamentario arduo para que la medida se convierta en realidad, en la coalición celebran como una victoria política haber logrado su aprobación en el Gobierno y haberlo hecho, además, ganando el pulso al PSOE al conseguir tramitar el texto de urgencia y tal y como salió del acuerdo con los sindicatos.