El 22 de febrero de 2000, hace ahora 25 años, ETA cometió un “magnicidio” en Vitoria. Asesinó con una furgoneta-bomba en el campus universitario a Fernando Buesa, de 54 años, y a su escolta, el ertzaina de 26 años Jorge Díez Elorza. Dos mujeres resultaron heridas. Buesa era ‘de facto’ el jefe de la oposición en Euskadi, portavoz socialista en el Parlamento Vasco y secretario general de su partido en Álava. Antes había sido vicelehendakari y consejero de Educación de 1991 a 1995 y diputado general entre 1987 y 1991, entre otros cargos institucionales y orgánicos, muchos de ellos simultáneos. Rechazó propuestas para ser ministro.