Una semana después en la coalición de Gobierno a cuenta de la política fiscal a los receptores del salario mínimo interprofesional, nada o casi se ha movido. Aunque ambas partes han querido escenificar que la sangre está lejos de llegar al río, con imágenes distendidas de Yolanda Díaz con Pedro Sánchez la semana pasada en el Pleno y con María Jesús Montero este mismo lunes durante la presentación de un documental, el pulso entre Hacienda y Trabajo se mantiene intacto: los socialistas no ceden por ahora en su decisión de que el SMI tribute por primera vez en el IRPF; y Sumar sigue firme en su intención de tumbar esa medida en el Congreso.