Todos los artículos sobre la dimisión de Mazón están ya escritos

El PP y los medios conservadores dan por liquidado al presidente valenciano, solo a la espera del «momento adecuado»: cualquier suceso mayor que monopolice la atención y así dejarlo caer sin tanto ruido

Si mañana muriese el Papa Francisco (y no le deseo ningún mal), al minuto veríamos especiales televisivos con acabadísimos reportajes, y vaticanistas sentados en los platós. Los periódicos publicarían de inmediato extensas necrológicas, editoriales, galerías fotográficas, artículos y análisis de expertos. Los directores solo tendrían que darle al botón de “publicar”, pues la muerte del Papa está ya escrita y guardada en un cajón. No por ningún mal fario, sino por adelantar trabajo: un Papa de 88 años tiene siempre la necrológica preparada por si acaso, y más si lo hospitalizan por una infección respiratoria.

Es sabido que los medios tenemos ya escritos los obituarios de personajes públicos en edad avanzada o de salud delicada, a veces desde muchos años antes de que mueran. Lo mismo el Papa que exlíderes mundiales muy ancianos, viejas estrellas del cine o del deporte, todos enterrados por adelantado en una carpeta. Nada macabro, pura previsión.

Algo así pasa estos días con Carlos Mazón: todos tenemos ya escrita su dimisión, a la espera de que llegue. Editoriales, artículos y viñetas humorísticas en la carpeta de borradores, listas para ser actualizadas y publicadas en cuanto caiga. Incluida la prensa conservadora, que lleva días dejándolo caer, tras sostenerlo durante meses. También los tertulianos de derecha están virando deprisa, no sea que dimita antes de tiempo y del volantazo discursivo se salgan en la curva.

Lo mismo en el PP: sus portavoces, los barones regionales y el propio Feijóo tendrán ya escritos sus argumentarios para el día de su caída, con toda la sordina posible para que no se note mucho que lo respaldaron y ovacionaron durante meses. Nos presentarán su dimisión como “un ejemplo de asunción de responsabilidades mientras el gobierno central no asume las suyas”, y compararán al generoso Mazón con un Sánchez aferrado al sillón. Feijóo intentará además colarlo como demostración de su autoridad interna, para más guasa.

Desde el PP llevan días haciendo correr la idea de que el presidente valenciano está sentenciado, y que solo esperan el momento adecuado para dejarlo caer. Ni los presupuestos con Vox lo salvarán. Los medios de la derecha lo repiten, y subrayan el alejamiento entre Feijóo y Mazón. Tampoco se van a dar mucha prisa, pues necesitan el “momento adecuado” para que su dimisión no les haga un roto aún mayor que su continuidad.

¿Cuál será el “momento adecuado” para dimitirlo? Cualquiera lo suficientemente gordo como para dejar su marcha en un segundísimo plano, Aunque el tiempo corre en su contra, pues la juez sigue investigando, en este tiempo de sobresalto permanente no tardará mucho en pasar algo gordo, sin precedentes, incluso “histórico”, ya sea una decisión judicial impactante, una nueva guerra, algún disparate de Trump o, ya que lo mencionábamos, un relevo en el Vaticano. Cualquier cosa que monopolice unos días la atención y así dejar caer con disimulo a Mazón, a la manera de esos mafiosos que aprovechan un gran desastre para, en medio de la confusión, deshacerse de cadáveres molestos. Hagan sus apuestas.