«El valle no se toca»: estudiantes falangistas intimidan y amenazan en la Universidad de Sevilla al profesor Joaquín Urías

Joaquín Urías ha encontrado pintadas en la puerta de su despacho con la firma de Juventudes Falangistas y, horas después, un estudiante le ha increpado afirmando que «los rojos fusilados fueron bien fusilados»

Dos detenidos en una protesta contra Macarena Olona en la Universidad de Granada

El profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla, Joaquín Urías, ha sido “intimidado y amenazado” por estudiantes falangistas, que no han dudado en atribuirse la responsabilidad de los hechos. Primero, la tarde de este martes se encontró con una pintada en la puerta de su despacho que decía ‘EL VALLE NO SE TOCA’, junto a la firma ‘JFE-SEU’ (Juventud Falangista Española-Sindicato Español Universitario), además de varias pegatinas del mismo grupo. A la mañana siguiente, y durante un consejo de departamento, un “estudiante ultraderechista” lo ha “increpado desafiante”, diciéndole que “quien siembra vientos, recoge tempestades” y que “los rojos fusilados fueron bien fusilados”, según cuenta a este periódico el profesor afectado.

Joaquín Urías fue letrado del Tribunal Constitucional y es colaborador de elDiario.es. Se presume que la pintada viene motivada por unas declaraciones que el profesor hizo en X hace una semana, en relación con una publicación de la organización ultracatólica Hazte Oír, que denunciaba a la exdiputada Esther López Barceló por decir que “habría que dinamitar” la cruz del Valle de los Caídos. A esto, Urías respondía: “Yo también quiero que dinamiten la cruz del Valle de los Caídos”.

SevillaelDiario.es ha hablado con el afectado, que ha declarado no estar “asustado”, pero sí reconoce sentir “cierta preocupación”. Aunque, inicialmente, calificaba la pintada en su despacho como “una gamberrada nazi, pero una gamberrada al fin y al cabo”, su visión de la situación ha cambiado tras haber sufrido tales increpaciones cara a cara: “Esto significa que es una amenaza con más trascendencia”, ha señalado.

Este mismo medio ha contactado con el Sindicato Español Universitario a través de X (misma red social a través de la que reivindicaban el acto de vandalismo), pero no ha recibido respuesta. Sí que respondieron, sin embargo, al decano de la Facultad de Derecho, Fernando Llano, cuando este denunció públicamente las pintadas en el despacho de Urías. El colectivo falangista contestó: “Señor Decano, ¿condena usted también las declaraciones del tipejo de su compañero? Además, ¿considera que dinamitar cruces forma parte del ambiente universitario?”.

Llano fue la primera persona en denunciar la pintada públicamente. En conversación con este periódico, el decano de Derecho ha calificado los sucesos como “absolutamente lamentables” y ha sido tajante en cuanto a las consecuencias administrativas que podrían sufrir los responsables en caso de ser identificados: “Cualquier forma de intimidación no debe permitirse y no se va a permitir. Hemos puesto en marcha una investigación para identificar si los individuos que han realizado las pintadas son estudiantes de la universidad. Por supuesto, no se descarta la posibilidad de escalar estas sanciones a otros ámbitos”, ha avanzado.

“El ambiente está muy extraño”

Estos sucesos han ocurrido apenas dos días después de otro hecho que refleja la intensidad del debate ideológico que vive el ámbito universitario andaluz: la detención de dos personas durante la protesta estudiantil por la charla de la exdiputada de extrema derecha, Macarena Olona, en la Universidad de Granada. Además, se sitúan en la semana en la que estaba previsto llevar a cabo la modificación de una placa en la que se hace referencia al dictador Francisco Franco, pero que aún no se ha dado.

Desde el Sindicato de Estudiantes de la Universidad de Sevilla reivindican “esfuerzos” como el que se hizo en Granada: “No vamos a permitir que se difundan este tipo de mensajes, ya sea a modo de charlas o en forma de actos intimidatorios como estas pintadas”. Para el Sindicato, estas pintadas tienen “más trascendencia de lo que parece”, pues “quieren hacer ver que están cerca, que pueden acercarse físicamente a tu lugar de trabajo. Es una amenaza en toda regla”, sentencian.

El decano lamenta percibir que el “debate ideológico universitario” pase del “intercambio de ideas en las aulas” a la “intimidación y el intento de censura”. Además, admite su asombro ante el perfil de los que se presumen responsables: “El Sindicato Español de Estudiantes está formado por gente joven, no entiendo que estas personas reivindiquen con tanto ímpetu los ideales del falangismo”, lamenta. Por todo ello, Fernando Llano admite estar “preocupado” porque la “polarización política acabe contaminando las aulas”.