Trump dice que ha tenido una conversación «muy buena» con Zelenski tras su llamada con Putin: «Vamos bien encaminados»

Ambos mandatarios han mantenido una conversación telefónica después de que el líder estadounidense pactara con su homólogo ruso un alto el fuego temporal acotado solo a los objetivos energéticos

El acercamiento de Trump a Putin se traduce en un alto el fuego de mínimos en unas negociaciones sin Ucrania ni Europa

El presidente de EEUU, Donald Trump, ha hablado este miércoles por teléfono con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, un día después de pactar con Vladímir Putin una tregua temporal acotada a los objetivos energéticos, mucho más limitada que la que Kiev había aceptado.

“Acabamos de mantener una muy buena conversación telefónica con el presidente Zelenski de Ucrania. Ha durado aproximadamente una hora”, ha dicho Trump en un escueto post en su red Truth Social. “Gran parte de la conversación se basó en la llamada de ayer con el presidente Putin para alinear tanto a Rusia como a Ucrania en cuanto a sus peticiones y necesidades. Vamos muy bien encaminados, y pediré al secretario de Estado, Marco Rubio, y al asesor de Seguridad Nacional, Michael Waltz, que hagan una descripción precisa de los puntos tratados. Esa declaración se publicará en breve”.

Se trata de la primera conversación conocida entre ambos mandatarios después de que el presidente ucraniano abandonara el Despacho Oval tras ser abroncado por Trump delante de las cámaras a finales de febrero. Desde entonces, Kiev ha hecho concesiones ante la presión de Washington, que llegó a cortar su suministro militar y de inteligencia. Zelenski aceptó a duras penas la tregua por tierra, mar y aire propuesta por el mandatario estadounidense, mientras que Putin sigue sentado en la mesa con una larga lista de demandas y líneas rojas. 

El líder ucraniano había anunciado este miércoles que esperaba hablar con el presidente de EEUU sobre su llamada de 90 minutos con Putin. Lo ha hecho en una rueda de prensa junto al presidente finlandés en la que ha rechazado que se suspenda la asistencia militar a Kiev como pide Rusia para acordar un alto el fuego temporal.

Preguntado si Ucrania participará en las conversaciones de seguimiento el próximo domingo en Arabia Saudí, Zelenski había respondido que revelaría los detalles después de hablar con el presidente de EEUU, pero que está dispuesto a enviar a su equipo técnico “para discutir los próximos pasos”.

Steve Witkoff, enviado de Trump que está desempeñando un papel clave en las negociaciones sobre Ucrania, ha dicho que espera que las conversaciones entre Estados Unidos y Rusia continúen el domingo en Arabia Saudí. Más tarde, el asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, ha dicho que ha acordado con su homólogo ruso que los equipos técnicos de las dos partes mantengan más conversaciones en Riad “en los próximos días” para centrarse en el alto el fuego parcial acordado con Rusia.

Antes de la conversación telefónica, el presidente ucraniano ha remarcado que “las palabras de Putin son muy diferentes a la realidad” y ha insistido en que Kiev tiene como línea roja el no reconocimiento de los territorios ocupados como rusos. La semana pasada, Trump aseguró ante el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, que ya había hablado con Ucrania sobre los territorios que perdería para llegar a un acuerdo de paz. El medio Semafor publicó también que Trump está considerando entregar Crimea a Rusia. 

Este martes, Zelenski había aceptado en principio la pausa de ataques sobre objetivos energéticos pactada por Trump con Putin. Sin embargo, se había mostrado cauteloso a la espera de recibir más detalles de EEUU a la vez que pide una mayor presión sobre Moscú, argumentando que Putin no quiere terminar la guerra.

Ucrania accedió la semana pasada a un cese total de las hostilidades por un período de 30 días propuesto por EEUU que Rusia –que quiere seguir manteniendo el interés de Trump– rebajó a un alto el fuego limitado a los ataques al sector energético –justo cuando llega a la primavera– que podría extenderse después a las hostilidades en el mar Negro.

En una entrevista con Bloomberg TV, Witkoff ha dicho que cree que se puede alcanzar una tregua total entre Rusia y Ucrania “en un par de semanas”.

El líder ruso ya rechazó en esencia la propuesta estadounidense de tregua la semana pasada, poniendo sus propias condiciones. “En las actuales negociaciones con Washington, la principal tarea de Putin es no romper la dinámica positiva en los contactos bilaterales, sin renunciar a sus posiciones sobre Ucrania”, dice Tatiana Stanovaya, fundadora del ‘think tank’ R.Politik. Según su análisis, las exigencias rusas hacen que las perspectivas de un acuerdo de paz con Ucrania “sean más que dudosas y remotas, pero Putin entiende lo importantes que son para Trump los éxitos y acuerdos tangibles”.

Poco antes de la llamada entre Trump y Zelenski, Kiev y Moscú han confirmado que han intercambiado a 175 prisioneros de guerra cada uno, mientras que Rusia ha liberado a 22 ucranianos “gravemente heridos” en lo que ha presentado como un “gesto de buena voluntad”.

Trump ha emprendido un giro abrupto en la política sobre la guerra de Ucrania, incrementando sustancialmente la presión sobre Kiev a medida que se aproxima a Moscú y rompe el aislamiento de Putin por parte de Occidente.

El acuerdo sobre los minerales

Otro tema que tienen pendiente Trump y Zelenski es la firma del acuerdo de explotación de los depósitos minerales de Ucrania. La visita del presidente ucraniano a Washington a finales de febrero tenía como principal objetivo cerrar el trato, pero la reunión terminó con una fractura en las relaciones entre Estados Unidos y Ucrania que Zelenski ha tratado de reconstruir. 

El texto inicial que se acordó establecía que los recursos minerales ucranianos, incluidos el petróleo y el gas, se explotarían conjuntamente entre EEUU y Ucrania después de que Washington retirara su exigencia de obtener derechos sobre 500.000 millones de dólares en ingresos potenciales derivados de ello. Está por ver si Trump ahora intentará estrujar más a Kiev en pleno deterioro de las relaciones y la situación de debilidad a la que Estados Unidos está empujando a Ucrania. En su esfuerzo por reconciliarse con el principal proveedor de apoyo militar, Zelenski afirmó que estaba dispuesto a firmar el acuerdo de la manera que más le “convenga” al magnate.

El texto original tampoco concedía ningún tipo de garantía de seguridad para Ucrania por parte de Washington. Zelenski quería arrancárselo a Trump en la reunión en el Despacho Oval, aunque fracasó, como ya se vio ante las cámaras.