El Gobierno avanza en la resignificación del Valle de Cuelgamuros. Tras pactar con la Iglesia no será desacralizado y los benedictinos permanecerán en él, tal y como le toca el turno al concurso de ideas con el que el Ejecutivo quiere transformar el mausoleo franquista. Así, a finales de la semana que viene prevé lanzar la convocatoria, abierta a candidaturas a nivel internacional, según fuentes del Gobierno. De ahí saldrá el proyecto ganador con el que se intervendrá la mayor parte del complejo, a excepción del altar mayor y las bancadas de la basílica, que seguirá dedicándose al culto católico.