El plan de gestión del lobo de Cantabria se encamina a los tribunales por incluir el sacrificio de ejemplares

Ecologistas en Acción reduce «el número real» en torno a 50, agrupados en 18 manadas, mientras que Adena-WWF anuncia medidas judiciales ante la decisión del Gobierno cántabro de matar ejemplares

Antecedentes – El Gobierno de Cantabria da la orden de sacrificar 41 lobos de forma “inminente”

La asociación ecologista Adena-Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF, World Wildlife Fund) llevará a los tribunales el plan de gestión del lobo de Cantabria una vez dictada la resolución de sacrificar 41 ejemplares, el 20% de la población de este cánido en la comunidad autónoma, según los cálculos del Ejecutivo autonómico. Así se desprende de una comunicación pública de esta organización tras el anuncio hecho por la consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Susinos (PP), coincidiendo con la última reunión de la Mesa del Lobo, hace una semana, en Santander. “Llevaremos a los tribunales cualquier plan de las comunidades autónomas para matar lobos que incumplan las leyes europeas”, subrayan.

Ecologistas en Acción en Cantabria, por su parte, mantiene su oposición a la política del Gobierno de Cantabria y considera que el sacrificio de ejemplares no reducirá los daños en la cabaña ganadera. Tampoco cree las estimaciones del último censo realizado: de los 200 ejemplares que se calcula campan por Cantabria, Ecologistas en Acción los reduce a 50, aproximadamente, agrupados en 18 manadas al aplicar un coeficiente menor para el cálculo de ejemplares.

“Tras la maniobra legislativa en el Congreso de los Diputados para sacar al lobo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), comunidades como Cantabria y Asturias han anunciado su intención de aprobar planes que incluyen la matanza de hasta el 20% de sus poblaciones de lobos ibéricos. Sin embargo, denunciamos que estas acciones incumplen la normativa europea, pues el hecho de que una especie de fauna sea gestionable (que no esté estrictamente protegida) no elude la obligación de mantener sus poblaciones en un estado de conservación favorable, algo que no sucede en España”, ha argumentado WWF.

Entre las sentencias citadas, se centra en la que se emitió en julio de 2024, cuando el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) anuló el plan de Castilla y León que permitía la caza de 339 lobos entre 2019 y 2022 al norte del río Duero. La sentencia estableció que “el lobo no puede ser declarado como especie cazable en el ámbito regional cuando su estado de conservación a nivel nacional es desfavorable”.

También desde Ecologistas en Acción en Cantabria han defendido la necesidad de que el lobo recupere la protección que se había alcanzado en el año 2021 al incluirse en la lista del Lespre “y seguiremos defendiendo que es la mejor medida para proteger el lobo y desarrollar políticas de prevención y mejora del cuidado del ganado”. Además, la organización no da credibilidad a las cifras de población del censo elaborado por el Gobierno de Cantabria. Según la Consejería, la cantidad de lobos que hay en Cantabria ronda los 200 ejemplares, con una cantidad media de unidades de cada manada de nueve.

“Estas conclusiones son erróneas, según diversas fuentes científicas que estiman el tamaño de las manadas en la Cornisa Cantábrica y en Picos de Europa entre 3,8 y 5,1 unidades”, ha expuesto desde Ecologistas en Acción. “La estimación que puede hacerse del número real de lobos en Cantabria es mucho menor, y estaría en torno a las 18 manadas, que en total rondarían los 80 ejemplares”.

La inclusión del lobo en el Lespre en el año 2021 no solo fue una decisión política, sino que tuvo el informe favorable de un Comité Científico independiente que contaba con el respaldo de todas las administraciones tanto del Estado como de las autonomías, ha insistido esta organización.

“Este cambio normativo no solo va a tener repercusiones negativas para el lobo, al permitir su captura y muerte, sino que supone la desaparición de importantes ayudas para la ganadería que, además, seguiría viéndose afectada por los ataques, que podrían incluso aumentar como se refleja en la literatura científica. Es una política regresiva, ineficaz, como se ha demostrado en todos los años anteriores a 2021 donde se han estado cazando lobos en Cantabria y que ignora las evidencias científicas que demuestran que el lobo sigue estando amenazado”, ha concluido Ecologistas en Acción.

Acción inminente

Esta misma semana, el Gobierno que preside María José Sáenz de Buruaga (PP), a través de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, ha publicado un Boletín Oficial de Cantabria (BOC) extraordinario con la resolución que establece el cupo de “extracciones” de ejemplares de lobo a llevar a cabo en la comunidad, con un total de 41 ejemplares para la temporada 2025/2026, una vez que la Ley de Desperdicio Alimentario ha sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Según se recoge en la resolución, se matarán ejemplares de lobo en las zonas de Liébana (4), Nansa (5), Saja (5), Besaya (5), Pas-Pisueña (5), Asón-Miera (2) y Campoo-Los Valles (10). A ellos se suman la captura de otros tres ejemplares dentro de municipios que se encuentran incluidos en la zona 2 -presencia del lobo menos estable- y dos más en los municipios incluidos en la zona 3 -sin presencia habitual de la especie o alguna esporádica-.