IU critica la «actitud favorable» del PSOE a participar en la «carrera armamentística» de Von der Leyen

La formación que lidera Antonio Maíllo afirma que su presencia en el Gobierno debe servir para obligar a modificar la política de rearme en Europa

El Gobierno suma otros 2.000 millones en transferencias de crédito para cumplir con el gasto en Defensa sin presupuestos

Izquierda Unida cree que el PSOE está cediendo a la presión belicista que está liderando la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ante los movimientos de placas que ha ocasionado la llegada de Donald Trump a la geopolítica mundial. La organización que lidera Antonio Maíllo ha emprendido un proceso de debate para dar una respuesta a la carrera armamentística que ha emprendido el continente y que creen que el Gobierno español debe frenar lo antes posible. La superviviencia de la coalición progresista, defiende, depende de alcanzar ese objetivo.

Estas son algunas de las conclusiones que salieron el pasado martes del documento que aprobó el Consejo Federal de IU reunido de forma extraordinaria para analizar los alcances del nuevo escenario internacional, marcado por el plan de rearme de la Unión Europea pero también por las tensiones que ha originado la guerra comercial lanzada por el presidente de Estados Unidos en los últimos días y a la que los 27 ya han comenzado a responder.

El informe aprobado el pasado martes servirá como base para marcar la posición de IU, que la organización debatirá en sus próximos órganos de dirección, en contexto en el que “el fascismo resurge con fuerza” y en el que la UE ha adoptado discursos y argumentos belicistas “que cada vez la alejan más de los presupuestos que dice defender, esto es, la defensa de los derechos humanos, el multilateralismo y la resolución diplomática de conflictos y el fortalecimiento de la democracia”.

En ese contexto, la formación de Antonio Maíllo critica que el PSOE haya cedido a las presiones belicistas de la UE y se muestre con una “actitud favorable” a participar en la carrera armamentística de Von der Leyen. Y por eso pide dar una batalla en el seno del Gobierno para evitar que España forme parte de esa estrategia de rearme. “Si no lo evitamos, la socialdemocracia española se alineará con la europea y con el pacto de gran coalición existente en la Unión Europea entre centro izquierda, derecha y extrema derecha en materia de política armamentística”, dice el informe al que ha tenido acceso este diario.

IU, que cree que sus posiciones han ido ganando peso en el espacio político de la izquierda, cree que la superviviencia del Gobierno depende del éxito de esa batalla en el Ejecutivo. “Nuestra presencia en el Gobierno de coalición debe servir para obligar a modificar una política de rearme en Europa que limita seriamente el desarrollo de políticas públicas sociales y nos acerca peligrosamente a un conflicto armado generalizado en el continente”, dice el informe. “Seguir manteniendo un Gobierno democrático y progresista que sea una excepción frente a los gobiernos de derecha y extrema derecha mayoritarios en Europa depende de conseguir frenar esta carrera armamentista”, añade.

Precisamente este martes el Consejo de Ministros aprobó una nueva partida de 2.000 millones de euros para gasto en Defensa. En concreto, 2.084 millones de euros dedicados “a la modernización, mantenimiento y mejora de los efectivos, infraestructuras e instalaciones atribuidas al Ministerio de Defensa” que se aprobaron en forma de transferencia de crédito. Según el Gobierno, servirán “para atender programas y contratos que ya estaban en marcha”.

Los ministros de Sumar, entre ellos la de Juventud Infancia, Sira Rego, que forma parte de Izquierda Unida, presentaron una serie de objeciones, una medida de oposición simbólica que no tiene mayor recorrido toda vez que el PSOE cuenta con una amplia mayoría en el Consejo de Ministros.

“El aumento de gasto militar desde 2020 ha girado en torno a 8.000 millones de euros, y la última partida de algo más de 2.000 millones para actualización de armamento, mantenimiento de material militar o ciberseguridad, aunque no entra dentro de las exigencias OTAN del 2% del PIB de aportación adquieren una nueva relevancia en esta espiral belicista que rechazamos rotundamente y a cuya contribución nos oponemos con claridad”, dice IU, que admite las dificultades que presenta la correlación de fuerzas dentro del Gobierno, con Sumar en clara minoría.

“Por consiguiente, es fundamental una implicación social que envuelva y refuerce las tesis que defendemos. Para tal fin es fundamental el trabajo que se desarrolle en la Plataforma social y política por la Paz en la que participa IU. No renunciaremos a defender nuestro modelo en todas las terminales posibles, de gobierno principalmente, pero también en los parlamentos y plenos municipales”, reclama la formación de Maíllo.

El informe también aborda las consecuencias de la guerra comercial emprendida por Trump y contra la que el Gobierno ya ha aprobado un plan de respuesta. La idea del real decreto del Ejecutivo, ya aprobado en Consejo de Ministros, es movilizar 14.000 millones de euros en ayudas para las empresas exportadoras.

IU se propone “hacer un seguimiento estricto de las consecuencias de esta guerra comercial para estar en condiciones de responder políticamente en cada momento”. Aunque Sumar apoyará el paquete de medidas, varias voces dentro de la coalición han pedido al Partido Socialista ir más allá con algunas de las medidas. “Es el momento desde el Gobierno de incrementar la tributación a los grupos transnacionales que operan en nuestro país y que pretenden beneficiarse de la guerra arancelaria y de la carrera de armamentos”, reclama en este informe la formación.

“El criterio de reciprocidad y la atención y protección del Estado de los sectores afectados -en torno a 22.000 empresas de manera directa- debe anteponerse en una actitud de pedagogía política que, en el medio rural y el sector agrario, sea un acicate para ganar terreno en sectores que pueden volver a girar su atención en sus alianzas tradicionales con la izquierda”, concluye.