La empresa reconoce los 2.059 despidos como ceses improcedentes y zanja así el mayor expediente de regulación en Catalunya desde el cierre de la Nissan en 2020
Meta cierra el centro de moderación de contenidos de Facebook e Instagram en Barcelona
La empresa Telus ha llegado a un acuerdo con los trabajadores de su centro de moderación de contenidos de Meta en Barcelona. La subcontrata inició un ERE después de que la multinacional, propietaria de Facebook e Instagram, decidiera prescindir de los servicios de la empresa el pasado abril.
El expediente de regulación se saldará con 2.059 despidos, prácticamente la totalidad de la plantilla (sólo 55 personas quedan exentas), y los afectados serán indemnizados con 33 días por año trabajado. Se ha pactado una indemnización mínima de 1.500 euros y un máximo de 24 mensualidades. Esto supone que, de media, cada uno de los trabajadores recibirá unos 8.600 euros, según cálculos aproximados de personas cercanas a la negociación.
Esta cifra se obtiene teniendo en cuenta que la permanencia media en la empresa es de 3 años y medio, pero hay que tener en cuenta que cada quien cobra diferente en función del turno, el número de horas trabajadas y del número de idiomas que hablaba, que suponían un plus en la nómina.
Con esta indemnización, la empresa reconoce los despidos como ceses improcedentes y con el acuerdo evita judicializar el expediente. Algunos trabajadores consultados por este periódico afean a la empresa y a los representantes de los trabajadores que este proceso se haya dado “demasiado rápido” y “de espaldas a la plantilla”.
Se refieren, por ejemplo, a que la votación del acuerdo se dio “en pleno puente” -el plazo para votar era entre el 1 y el 2 de mayo- y que se ha llegado a un pacto que “desincentiva” a los trabajadores a seguir con las demandas colectivas que ya se habían planteado. Se espera que el acuerdo se firme este mismo lunes en las oficinas del Departament de Trabajo después de que el 96% de la plantilla lo refrendara.
El documento informativo, al que ha tenido acceso elDiario.es, también especifica que la empresa garantiza que las personas afectadas por el ERE tendrán “prioridad de contratación” si Telus vuelve a iniciar un proceso de selección y que, además, ofrecerá a los afectados las posiciones disponibles en centros de otras ciudades europeas.
De esta manera, Telus y los trabajadores cierran el ERE más multitudinario de los últimos años, sólo superado por los más de 2.500 despidos de la Nissan en 2020.
Investigada por los problemas de salud mental de la plantilla
Más allá del proceso del expediente, la empresa (primero CCC Barcelona Digital Services y luego absorbida por Telus Digital) está siendo investigada actualmente por la Justicia después de que varios trabajadores denunciaran “secuelas mentales” derivadas de sus jornadas de trabajo. Así lo determinó el Juzgado de lo Social 28 de Barcelona, sentencia que fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, que reconoce como accidente laboral los trastornos de un empleado.
El hombre, representado por el abogado Francesc Feliu del Espacio Jurídico Feliu Fins, trabajaba como moderador de contenidos en esta empresa desde septiembre de 2018 y estuvo de baja de mayo de 2019 a febrero de 2021, con “ataques de pánico, conductas de evitación, aislamiento en el domicilio y rumiaciones hipocondriformes, sensación de disfagia, despertares nocturnos e importante tanatofobia”.
En su trabajo tenía que clasificar contenidos para que los inadecuados no llegaran a publicarse, y como miembro del equipo de ‘high priority’, tenía que ver contenido relacionado con terrorismo, suicidios, automutilaciones, decapitaciones de civiles a manos de grupos terroristas y torturas.
“Cada escena la tenía que ver el actor varias veces, de manera completa, para asegurarse de que la política aplicada a ese contenido gráfico era la adecuada”, remarca el juez, que añade que la web de la empresa califica a sus trabajadores como héroes no reconocidos en Internet por su trabajo de limpiar las redes de contenido inadecuado.
Tras lograr varias victorias en los juzgados sociales, el letrado al frente de la causa dirige ahora una acusación de la primera causa penal abierta en Europa por los efectos “devastadores” en la salud mental de los moderadores de contenidos de redes sociales.