El presidente defendió que la donación de un avión valorado en 400 millones de dólares por parte del Gobierno qatarí era «una transacción muy pública y transparente»
Trump quiere aceptar un avión de lujo como regalo de Qatar en medio de las acusaciones de “soborno”
Donald Trump se siente muy cómodo haciendo caso omiso de las críticas de los demócratas y de los “medios de noticias falsas”, pero cuando las críticas por su decisión de aceptar un lujoso avión de 400 millones de dólares del Gobierno qatarí provienen de sus partidarios más devotos, quizá convenga que el presidente estadounidense escuche.
Estrellas del firmamento Make America Great Again (MAGA) de Trump se han pronunciado en términos inequívocos contra el plan de que Qatar le regale un jet descrito como un “palacio en el cielo” y lo convierta en el Air Force One. Están condenando la idea en el propio lenguaje de Trump, diciéndole que esto no es “drenar el pantano” como prometió hacer durante su primera presidencia, y tampoco se ajusta al lema de su segundo mandato en el Despacho Oval: “América primero”.
Ben Shapiro, el destacado comentarista de derechas, lideró los ataques en su podcast diario. “El presidente Trump prometió drenar el pantano, y esto no es, de hecho, drenar el pantano”, afirmó.
Shapiro vinculó a Qatar con el grupo islamista palestino Hamás y con la cadena Al Jazeera –con base en Qatar y financiada por el emirato, y ampliamente detestada por la derecha– para atacar la decisión: “Tomar sacos de golosinas de personas que apoyan a Hamás, la Hermandad Musulmana, Al Jazeera, todo lo demás, eso no es América Primero”. Y se preguntaba: “¿Es bueno para el presidente Trump? ¿Es bueno para su agenda? La respuesta es no, no lo es. Si quieres que el presidente Trump tenga éxito, este tipo de cosas sórdidas deben parar”.
La donación del jumbo Boeing 747-8, de 13 años de antigüedad, que Trump heredaría personalmente cuando abandone la Casa Blanca, ha logrado lo aparentemente imposible: ha unido a los más fervientes admiradores del presidente y a sus más acérrimos detractores.
Laura Loomer, la influencer de extrema derecha, advirtió de que ese regalo sería “una mancha muy grande en la Administración” Trump. Loomer dijo que amaba a Trump y que “recibiría una bala por él”. “Pero tengo que llamar a las cosas por su nombre. No podemos aceptar un ‘regalo’ de 400 millones de dólares de yihadistas trajeados”, agregó.
El conservador New York Post, por su parte, publicó un editorial titulado: “El avión de Qatar NO es un ‘regalo’ – y Trump no debería aceptarlo como tal”.
Las voces de derechas en las redes sociales han procedido a sacar a relucir material incómodo para Trump con un entusiasmo que normalmente reservan para los demócratas progresistas. Un clip de Trump hablando en el césped de la Casa Blanca en 2017, acusando a Qatar de ser históricamente “un financiador del terrorismo a un nivel muy alto”, circuló ampliamente en internet.
La vorágine se produce mientras Trump está realizando una gira de cuatro días por los países del Golfo, incluido Qatar, adonde llegó este miércoles. El presidente ya ha sellado acuerdos económicos de gran valor con Arabia Saudí y con el propio Qatar, que ha formalizado el mayor pedido de la historia de la compañía estadounidense Boeing para comprar aviones por más de 200.000 millones de dólares.
Los republicanos del Senado estadounidense también han empezado a alzar la voz, hablando ominosamente de cuestionar el regalo en virtud de la cláusula de emolumentos de la Constitución. Esa cláusula impide a los funcionarios federales, incluido el propio presidente, aceptar regalos y pagos de alto valor de gobiernos extranjeros sin el visto bueno del Congreso.
Rand Paul, senador republicano por Kentucky, declaró a la cadena de televisión conservadora Fox News que, en su opinión, “no merece la pena” que Trump acepte el regalo por la mala imagen que proyectaría. “Sea impropio o no, no creo que merezca la pena”, dijo Paul. Y añadió: “No es como un viaje en avión. Estamos hablando de todo el avión de 400 millones de dólares”.
Mientras, los legisladores demócratas de la Cámara de Representantes han instado a los republicanos a programar una votación si Trump acepta un reemplazo gratuito del Air Force One. El representante Ted Lieu argumentó que se requiere la aprobación del Congreso: “La gente debe preguntarse: ¿Por qué un país extranjero intenta darle este regalo tan enorme a Donald Trump?”, señaló Lieu. “Piensen en el precedente que sentaría”.
Texto traducido y actualizado por elDiario.es