El Ejecutivo reconoce que en agosto ya se inspeccionó la explotación avícola y se detectaron varios incumplimientos graves que derivaron en los correspondientes procesos administrativos y la imposición de medidas cautelares. Con todo, señala que no puede actuar «en base a una noticia»
INVESTIGACIÓN – La ‘granja de los horrores’ de Mallorca con certificado de bienestar animal: gallinas sin ver el sol y con cadáveres “putrefactos”
El Govern balear del PP no clausurará por ahora la macrogranja de Llucmajor (Mallorca) tras la difusión de imágenes inéditas grabadas entre los días 21 y 29 de abril y que muestran las condiciones de insalubridad, falta de higiene y suciedad extremas de su interior. El conseller de Agricultura, Pesca y Medio Natural, Joan Simonet, ha señalado que la Administración “tiene que actuar con pruebas” y, de lo que por el momento dispone el Ejecutivo es de la información “que ha salido en prensa”. “No podemos actuar en base a una noticia”, ha incidido, a pesar de reconocer que el pasado mes de agosto ya se inspeccionó la explotación avícola a raíz de diversas denuncias interpuestas y que se detectaron varios incumplimientos graves que derivaron en los correspondientes procesos administrativos y la imposición de medidas cautelares.
Así lo ha puesto de manifiesto este martes tras la primicia publicada por elDiario.es en torno a la polémica macrogranja, que vuelve a estar bajo la lupa de organizaciones de protección medioambiental y animal a raíz de la revelación de la grave situación de las gallinas. “Lo que sí hacemos es actuar cuando vemos la noticia”, ha señalado el conseller, quien ha señalado que inspectores de su departamento y agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han inspeccionado esta mañana la explotación avícola.
El conseller ha admitido que en octubre se denunció ante la Fiscalía la posible comisión por parte de los responsables de la granja de un delito ambiental. El Seprona visitó las instalaciones y realizó las correspondientes diligencias, pero el procedimiento fue archivado el pasado febrero. La última inspección, por parte del Govern, se hizo el pasado 27 de febrero. Los funcionarios de la Conselleria, ha asegurado Simonet, no vieron la situación que ahora han denunciado las entidades animalistas.
Las asociaciones de protección medioambiental y animal ARDE y Satya Animal han exigido “el cierre inmediato” de la macrogranja tras denunciar a la empresa Avícola Son Perot S.A. ante la Fiscalía de Medio Ambiente de Balears por presuntos delitos de estafa, contra la salud pública y de abandono animal por falta de supervisión veterinaria, como avanzó este periódico.
Las imágenes documentadas por ARDE y Satya Animal, avanzadas en primicia por elDiario.es, muestran cómo las gallinas camperas no tuvieron acceso al exterior de las instalaciones entre los días 24 y 29 de abril. Todo ello ocurrió pese a que la empresa cuenta con el certificado de bienestar animal Welfair. El vídeo difundido muestra que los animales viven en condiciones penosas, ya que las gallinas vivas conviven con decenas de cadáveres en diferentes estados de descomposición, incluso con esqueletos y otros animales, como ratas (vivas o envenenadas) y erizos. Por estos motivos, ARDE también ha iniciado una recogida de firmas para reivindicar el cierre de la macrogranja.