Rechazo de la oposición a la candidata del PP para TVG: «De sus 416 viernes al frente de los informativos, 366 fueron negros»

Nacionalistas y socialistas se oponen al nombramiento de Concha Pombo como directora xeral de la corporación de medios públicos por considerarla responsable de la manipulación informativa mientras los populares creen que su trayectoria la avala como una aspirante «impecable»

El PPdeG propone a Concha Pombo, la actual responsable de informativos, como su candidata para dirigir la CRTVG

La comparecencia en el Parlamento gallego de la única candidata para dirigir la corporación de medios públicos gallegos —CSAG, la antigua CRTVG— se ajustó al guion previsto. Los populares defendieron como “impecable” su apuesta por Concha Pombo, responsable de informativos de la casa desde 2017 o, en palabras de la nacionalista Olalla Rodil, durante 416 viernes de los que 366 fueron venres negros de protestas contra la manipulación y el control político. BNG y PSOE se opusieron al nombramiento de la opción “más radical”, según la socialista Silvia Longueira. Pombo, por su parte, pasó de puntillas por los charcos informativos. Centró su intervención en los retos tecnológicos y, ante el desplome de TVG en los audímetros, en reclamar un nuevo modelo para medir espectadores

En su intervención inicial, la candidata a sustituir a Alfonso Sánchez Izquierdo —quien ha cumplido ya 16 años en el cargo— recordó que entró como becaria en TVG en 1998, por lo que la posibilidad de que pueda convertirse en la máxima autoridad de la CSAG manda “un mensaje tremendamente poderoso” a los trabajadores. En ese período, sólo se ausentó de la tele durante cuatro años, un tiempo en el que dirigió el gabinete de prensa del conselleiro de Emigración de Fraga y un programa, para el propio canal público, aunque desde una productora.

Las “demandas de los tiempos nuevos”, la “post TDT y la post FM” fueron los grandes ejes del discurso de Pombo que, más allá de su intención de hacer “buenos informativos, espacios meteorológicos y de deportes”, mientras se consiguen los “mejores” contenidos, apenas tocó una de las cuestiones más espinosas en la parrilla de la TVG, la que recaía en su área de responsabilidad. Sí sacó pecho de la labor tanto en la pandemia del COVID como durante el apagón del 28 de abril.

La directora xeral “in pectore” —como la definió el único diputado de Democracia Ourensana, Armando Ojea— hizo además una encendida defensa de los resultados de audiencias de los medios públicos. De nuevo volvió a aferrarse al EGM, que en la última oleada dio a TVG sus mejores datos desde 2008, con una media de un 24% de share, y obvió los datos de los audímetros que en abril la colocaron con un 7,8% como quinto canal autonómico en porcentaje de espectadores.

Frente a eso, Pombo esgrimió los datos de redes sociales —16 millones de espectadores en TikTok, 14 en instagram y casi 36 en Facebook— tras lo que pidió un “modelo híbrido” de medición de audiencias con “amplia huella social”.

Tras presumir del saneamiento económico de la corporación, se marcó como objetivo inmediato finalizar la digitalización de la radio y emprender la del archivo histórico, el que va de 1985 al año 2000. Y frente a un cambio, el de CRTVG por CSAG que puede “dar vértigo” apostó por reforzar la G de A Galega como marca. “Hay que querer a A Galega, hay que mimarla, promocionarla, dotarla y compartirla”.

BNG: “Frene esta deriva”

La intervención más dura fue, una vez más, la de la viceportavoz del BNG, Olalla Rodil, para quien Pombo “ya no merece el aval del Parlamento” por su trayectoria como parte de una dirección que “con su visto bueno” negaba derechos a los trabajadores de la corporación. “Es tan de la casa que lleva siendo directora de informativos desde 2017: ocho años, 96 meses y 416 viernes, 366 en negro”.

“Comparto que ‘hay que querer a A Galega‘ y añadiría que para quererla hay que respetarla”. Rodil recordó el “poder gigante” de cargos como responsable de informativos o directora xeral de la CSAG. “No es inocuo lo que aparece en el Telexornal ni lo que se oculta. No es baladí que se mienta”. Respaldó estas palabras con la sentencia de la Audiencia Provincial de A Coruña, que desveló durante la comisión, en la que se condena en segunda instancia a la TVG por “mentir” en una información sobre el BNG: aseguró que los nacionalistas no estaban en un acto de homenaje a Castelao en el que había cinco representantes institucionales de la formación, incluida la alcaldesa de Santiago, sentada en primera fila junto al conselleiro de Cultura.

La diputada del BNG recordó que, más allá de nombres, su preocupación pasa por el “modelo” de medios públicos, y eso, en un momento de “enormes retos” para el periodismo, como “la lucha contra los bulos, las mentiras y el descrédito” va “más alla de la tecnología, los proyectos de digitalización, los algoritmos o las cuentas en redes sociales”.

Rodil habló de nuevo en primera persona para señalar que “cualquiera que no sea del PP puede ser cancelado en TVG”. Recordó que a la líder de la oposición, Ana Pontón, no se la entrevista desde el 14 de febrero y porque obligaba la ley electoral. Lo comparó con los datos “públicos” de la cadena vasca ETB sobre presencia de los grupos políticos: “entrevistaron más veces al PP en tres meses, con un 9% de votos, que en TVG al BNG en un año, con un 31%”. Señaló que tampoco se dio “ni medio segundo” de información sobre el congreso de la CIG, el sindicato mayoritario en Galicia, mientras los de otras centrales tuvieron incluso entrevista en el matinal del día siguiente. “No sé si es veto, cancelación o que no estaba allí el presidente de Galicia. Sale más Rueda en el Telexornal que Franco en el NODO, es una cosa loquísima”.

Rodil finalizó con una petición a Pombo, quien “representa la continuidad de una de las etapas más nefastas” en los medios públicos gallegos, marcada por “el sectarismo y la mentira”: “Frene esto, pare esta deriva, devuélvale la TVG al conjunto del país”.

PSOE: “Más radical que Feijóo y Rueda”

“Esto para nosotros es una performance”. Suave en las formas pero contundente en el fondo, la socialista Silvia Longueira contrapuso la “perversión” de la “información líquida” a la que aludía el discurso de Pombo para recordarle que, si habla de la TVG, el medio —el canal televisivo— es el mensaje, y no los otros “caminos” por los que llegan sus contenidos.

“Queremos querer a A Galega, pero A Galega no nos quiere a nosotros”, replicó también antes de señalar que sólo se informa de los congresos de los sindicatos si acude el presidente de la Xunta o que no se cubren noticias después de las 20:30 horas, dos ejemplos de por qué el archivo que Pombo propone digitalizar como uno de sus proyectos estrella, está “sesgado”.

Tras felicitarla “por sororidad”, le recordó que llega al cargo impulsada por una ley redactada “a espaldas de la Mesa del Audiovisual, excepto algunas grandes productoras, y del Colexio de Xornalistas”, por lo que expresó sus “dudas” de que se busque la “información de calidad” citada por Pombo.

“Peleó con tres candidatos: eran Feijóo, Rueda y usted y eligieron al más radical posible”, sentenció Longueira, vaticinando que las denuncias de los venres negros y de los “trabajadores apartados de sus funciones” no tendrán “una buena resolución”. “Le deseo lo mejor, pero la modernidad líquida en la que va envuelta deja mucho que desear”, concluyó.

Para la portavoz del PP, la exconselleira Carmen Pomar, el nombramiento de Pombo, “una candidata impecable” es, sin embargo, un ejemplo de “meritocracia”, de “apostar por el talento propio y hacerlo rompiendo techos de cristal”. La diputada no ahorró elogios para su candidata, de la que destacó el expediente brillante, el “criterio propio que garantiza su independencia” y, en su bagaje, una vez más las “buenas audiencias y la excelente praxis profesional”.