La decisión del Tribunal de Comercio Internacional mejora el punto de partida del bloque comunitario en las negociaciones con Washington, aunque en Bruselas son conscientes de la volatilidad de Trump
Un tribunal de EEUU declara ilegales los aranceles generalizados de Trump
La Unión Europea contiene la euforia ante la que evidentemente es una victoria frente a la guerra comercial de Donald Trump: la declaración de ilegales los aranceles generalizados del 10% decretada por el Tribunal de Comercio Internacional, con sede en Nueva York. A la espera de que el presidente de EEUU, se pronuncie y recurra la decisión, para el bloque comunitario el punto de partida mejora ante las negociaciones que están en marcha con Washington para evitar los aranceles.
En la Comisión Europea han optado por la prudencia ante la decisión judicial, que puede no ser definitiva. En Bruselas están ya acostumbrados a la volatilidad de Trump, que hace una semana lanzó un nuevo órdago con la amenaza de un arancel adicional del 50% a la UE por considerar que las negociaciones no iban por el buen camino. Y lo anunció horas antes de que una llamada prevista entre los responsables de comercio de las dos partes. Ahora se ha reconducido la situación y se han emplazado a acelerar las negociaciones.
“No comentamos los procedimientos estadounidenses”, se limitan a decir en la Comisión Europea, donde desde hace tiempo hacen equlibrios entre dar apariencia de firmeza sin provocar la furia de Trump.
Ursula von der Leyen esquivó completamente el asunto en su discurso al recoger el premio Carlomagno. “Queremos volver a reforzar nuestra asociación comercial con EEUU”, fue la única alusión que hizo en una intervención de más de media hora de duración sobre los desafíos de Europa. Inmediatamente después, mencionó la que está siendo parte de la estrategia de la UE: ampliar los lazos con el resto de socios comerciales. “Sabemos que el 87% del comercio mundial se realiza con otros países que buscan estabilidad y oportunidades. Y Europa puede ofrecerlas”, afirmó la alemana, cuyo ejecutivo ha lanzado una estrategia para atraer el talento que está planteándose abandonar EEUU.
A la espera de que Trump se pronuncie e incluso de un posible vaivén tras la decisión judicial, para la UE es a priori una buena noticia el revés. “La decisión de los tribunales americanos de ayer es importante porque afecta a esos aranceles generalizados, a ese 10% generalizado que no debemos olvidar que no tiene que ser el punto de partida de la negociación, sino que el punto de partida tiene que ser la situación previa a la imposición de estos aranceles”, ha explicado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en un encuentro con la prensa española en Estambul, según recoge la Agencia EFE.
Igualmente, ha destacado la “reacción positiva” de los mercados ante la sentencia, que, a su juicio, confirma el argumento de la Unión Europea de que “los aranceles no son buenos para nadie, suponen un impacto negativo para el crecimiento” para ambos lados. “La Unión Europea tiene la mano tendida, por supuesto, pero no debemos tampoco olvidarnos de que, en caso de que no seamos capaces de llegar a un acuerdo, tenemos las herramientas necesarias para proteger a nuestras industrias y a nuestros trabajadores”, ha subrayado.
La UE ha suspendido la respuesta a los aranceles que siguen en vigor -el 25% al aluminio, el acero y los coches- para dar margen a la negociación, pero también está trabajando en las denominadas “medidas de re-equilibrio” por un valor de 95.000 millones de euros para poner en marcha en caso de que los aranceles de Trump persistan. Y los 27 ya han asumido que su desaparición completa es improbable.
En el caso de que Trump mantenga el órdago, la UE contempla más medidas, como impuestos a las ‘Big Tech’ o usar el instrumento anti-coerción, que da un amplio abanico de medidas, como la restricción de las exportaciones e importaciones o la prohibición de las empresas de otro país de acceder a licitaciones públicas.
Al igual que ha considerado el tribunal de EEUU, la UE está convencida de que la guerra comercial desatada por Trump es injustificada. “La imposición de aranceles sería ilegal y económicamente contraproducente, sobre todo teniendo en cuenta las cadenas de producción profundamente integradas que la UE y EEUU han establecido a través del comercio y la inversión transatlánticos”, señaló la Comisión Europea desde los primeros anuncios del presidente republicano.
Y espera el momento para litigar ante la Organización Mundial del Comercio (OMC). “La opinión inequívoca de la UE es que estos aranceles violan flagrantemente las normas fundamentales de la OMC. El objetivo de la UE es, por tanto, reafirmar que las normas acordadas internacionalmente son importantes y no pueden ser incumplidas unilateralmente por ningún miembro de la OMC”, agrega la nota. En el anterior mandato de Trump, la UE también recurrió a ese organismo multilateral y se suspendieron los aranceles impuestos en base a un acuerdo alcanzado como parte de ese procedimiento. O sea que Trump se enfrentará a varios litigios por su guerra comercial.