El presidente toma la iniciativa de cara a la cumbre de Barcelona y pide por carta a las Comunidades un pacto estatal en materia de vivienda en mitad de la ofensiva del PP contra el Gobierno: “Los españoles y españolas no nos eligen para que nos tiremos los trastos a la cabeza o llevemos el ruido partidista a las instituciones. Nos eligen para que dialoguemos, acordemos y resolvamos sus problemas. El de la vivienda es crucial y nosotros debemos estar a la altura».
El Gobierno asume una Conferencia de Presidentes sin acuerdos tras el intento de boicot del PP
Un acuerdo estatal para el acceso a la vivienda con compromisos recíprocos entre el Gobierno central y las comunidades autónomas. Esa es la propuesta que ha trasladado este miércoles Pedro Sánchez a los jefes de los Ejecutivos autonómicos mediante una carta a la que ha tenido acceso elDiario.es. De esta forma, Moncloa toma la iniciativa política de cara a la Conferencia de Presidentes que tendrá lugar este viernes en Barcelona y que llega en mitad de una ofensiva del PP contra Sánchez que ha supuesto incluso un intento de boicot a la cita.
“Propongo que tripliquemos la inversión pública en vivienda. Sugiero que pasemos de 2.300 millones de euros a 7.000 millones , de los que el Gobierno de España se compromete a aportar el 60%, unos 4.000 millones”, plantea Sánchez a los presidentes autonómicos en esa carta.
El presidente del Gobierno pone sobre la mesa, además, que esa inversión pública quede blindada para garantizar el acceso a una vivienda de los millones de españoles que no pueden asumir hoy los precios de un mercado disparado. “Vinculemos esta nueva inversión al compromiso de blindar de forma indefinida la calificación de viviendas con protección pública”, propone.
Sánchez detalla que , en los últimos 45 años, “las Administraciones públicas construyeron en España más de 2,4 millones de viviendas protegidas, pero la práctica totalidad de esas viviendas acabaron siendo descalificadas y vendiéndose en el mercado libre a precios elevados o en manos de fondos buitre”. Y por eso insta a los presidentes autonómicos a que se comprometan a que todas “las viviendas que se financien con dinero público mantengan de forma permanente su calificación de vivienda protegida y, por tanto, ofrezcan siempre una alternativa asequible de propiedad o alquiler para la ciudadanía.”
Por último, el Gobierno propone también acabar con el “monopolio de la información que tienen los portales privados y crear una base de datos pública que permita a las Administraciones estatales y a la ciudadanía conocer los precios reales de compra/venta o alquiler en su ciudad. Solo con esa transparencia se podrán diseñar políticas públicas realmente eficaces y ayudar a la ciudadanía a negociar de forma adecuada el precio de su casa”.
En mitad de la batalla política campal que protagoniza la derecha y que el PP concretará apenas 36 horas después de la cita en Barcelona con una manifestación que califica al Gobierno como una mafia, el presidente lanza un llamamiento a la política. “Los españoles y españolas no nos eligen para que nos tiremos los trastos a la cabeza o llevemos el ruido partidista a las instituciones. Nos eligen para que dialoguemos, acordemos y resolvamos sus problemas. El de la vivienda es crucial y nosotros debemos estar a la altura”, concluye.
