EEUU envía a Rubio y al emisario de Trump a París para hablar de Ucrania mientras avanza el acuerdo de minerales

El secretario de Estado estadounidense y Steve Witkoff viajarán a la capital francesa del 16 al 18 de abril para «mantener conversaciones con sus homólogos europeos»

Trump arremete contra Zelenski tras la última masacre rusa en Ucrania mientras Putin dilata las negociaciones

El jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, y el enviado de Donald Trump, Steve Witkoff, viajarán a París del 16 al 18 de abril para “mantener conversaciones con sus homólogos europeos” sobre Ucrania, según ha informado el Departamento de Estado de EEUU.

El comunicado dice que el objetivo es “avanzar en el objetivo del presidente Trump de poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania y detener el derramamiento de sangre”. “Durante su estancia en París, también discutirá formas de promover los intereses compartidos en la región”, agrega.

La visita había sido adelantada por Politico, que, citando fuentes familiarizadas con los preparativos, recoge que se espera que Witkoff se reúna directamente con el presidente francés, Emmanuel Macron, mientras que Rubio mantendrá conversaciones por separado con su homólogo francés. Tras las reuniones, Rubio tiene previsto partir hacia África.

La visita se produce después de que Witkoff –un promotor inmobiliario que se ha convertido en una pieza clave de la diplomacia de Trump para Ucrania– se reuniera el pasado viernes con el presidente ruso Vladímir Putin en San Petersburgo.

Witkoff describió posteriormente la conversación, que fue el tercer cara a cara que mantiene con el jefe del Kremlin, como “muy interesante” y dijo que ambas partes exploraron un posible acuerdo centrado en el estatus de los “llamados cinco territorios”. Aunque no los nombró, pareció referirse a Crimea, anexionada por Rusia en 2014, y a las provincias de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, parcialmente ocupadas por las tropas de Moscú. Kiev insiste en que nunca reconocerá los territorios ocupados como parte de Rusia, algo que ha descrito como una línea roja. El enviado de Trump afirmó que no solo habló con Putinde esto, sino que hubo “mucho más: hay protocolos de seguridad, no hay OTAN, Artículo 5 de la OTAN [la cláusula de defensa común], es decir, hay muchos detalles relacionados”.

Trump, que llegó al poder con la promesa de poner fin al conflicto, ha protagonizado un acercamiento a Rusia mientras vierte fuertes críticas a Ucrania, aunque en las últimas semanas ha expresado también frustración con el Kremlin. Moscú, que mantiene sus demandas maximalistas, se ha negado hasta el momento a aceptar un alto el fuego completo temporal propuesto por EEUU y llevó a cabo un ataque con misiles que dejó el domingo más de una treintena de civiles muertos en la región ucraniana de Sumi.

La semana pasada, el medio Axios reveló, citando una fuente familiarizada, que Trump podría imponer sanciones adicionales a Rusia si no se alcanza una tregua antes de fin de mes. Unos días antes, Rubio dijo que a Rusia se le estaba acabando el tiempo para convencer a la Administración Trump de que va en serio y deslizó que a Washington se le estaba acabando la paciencia. “Sabremos muy pronto, en cuestión de semanas, no meses, si Rusia habla en serio sobre la paz o no. Espero que así sea”, dijo el secretario de Estado en la cumbre de la OTAN en Bruselas.

Según ha revelado el Wall Street Journal, varios altos asesores de Trump le están aconsejando que sea más escéptico sobre el deseo de Moscú de lograr la paz, un grupo que, según fuentes del medio, incluye a Marco Rubio y al enviado para Ucrania, Keith Kellogg. De acuerdo con el mismo medio, han recomendado más cautela a la hora de tratar con Putin y una línea más dura contra las exigencias de Moscú de concesiones territoriales por parte de Kiev. No obstante, según el periódico, Trump sigue estando del lado de Witkoff, que cree que el presidente quiere la paz.

Witkoff levantó ampollas, cuando una entrevista emitida el viernes con el ultraconservador Tucker Carlson, antiguo presentador estrella de Fox News, dijo entre otras cosas que los ucranianos que viven en los territorios ocupados quieren “estar bajo el dominio ruso” porque lo han demostrado en “referéndums” –que fueron ampliamente rechazados por la comunidad internacional–, palabras que intentó matizar posteriormente.

En una entrevista reciente con CBS News, el presidente Volodímir Zelenski lamentó que las “narrativas rusas” estén “prevaleciendo” en Washington. “¿Cómo es posible ser testigo de nuestras pérdidas y nuestro sufrimiento, entender lo que los rusos están haciendo, y seguir creyendo que no son los agresores, que no empezaron esta guerra?”, dijo.

Ucrania habla de progresos en el acuerdo de minerales

Entretanto, Ucrania ha informado de progresos en las negociaciones con EEUU sobre el llamado acuerdo de minerales. Los equipos negociadores de ambos países han acordado plasmar en el memorando preliminar que tienen previsto firmar los puntos consensuados por ambas partes en las negociaciones sobre el pacto, con el que Washington quiere recuperar el dinero gastado en apoyar a Kiev durante la guerra.

“Nuestros equipos técnicos han trabajado juntos de forma exhaustiva en el acuerdo, y hay progresos sustanciales. Nuestro equipo legal ha armonizado varios elementos en el borrador del acuerdo”, ha escrito la titular de Economía de Ucrania, Yulia Sviridenko, en su cuenta de X. La ministra ucraniana ha agregado que ambas partes han “acordado plasmar estos progresos en el memorando de intenciones correspondiente”. “Estamos preparando la formalización a corto plazo completa del acuerdo”, ha explicado.

Según Sviridenko, que adelantó que el pacto final deberá ser ratificado por el Parlamento ucraniano y dijo que espera un acuerdo positivo que garantice inversiones en Ucrania y ofrezca beneficios económicos también a EEUU, los negociadores de ambas partes siguen trabajando en los “puntos específicos” sobre los que aún no hay consenso.

En una entrevista reciente, el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, dijo que los ucranianos habían presentado una contrapropuesta al último documento propuesto por Washington y que el acuerdo podría firmarse esta misma semana.

El acuerdo preliminar marco que ambas partes debían haber firmado en la visita fallida de Zelenski a la Casa Blanca del 28 de febrero preveía la creación de un fondo de inversión conjunto dominado por EEUU en el que se depositaría el 50% de los beneficios que genere la explotación futura de los recursos naturales ucranianos. El fondo ofrecería oportunidades económicas a empresas de EEUU y aseguraría inversiones estadounidenses en Ucrania.

Aunque el acuerdo marco nunca llegó a firmarse, Washington presentó a Kiev a finales de marzo un nuevo documento con más detalles que pretendía obligar a Ucrania a reconocer como deuda el monto de la ayuda militar recibida como donación de EEUU. Zelenski dejó claro en público que no aceptaría esta condición ni ningún punto del documento incompatible con la legislación de la UE, en la que Ucrania aspira a ser integrada lo antes posible.

Según medios estadounidenses, EEUU ha aceptado en las negociaciones de los últimos días eliminar algunas de las condiciones más desfavorables a Ucrania que había presentado en su última propuesta.