Los representantes locales confirman su apoyo a la reforma de la normativa de Extranjería y cuentan con que cuatrocientos jóvenes migrantes puedan salir de la localidad, empezando antes de verano, en dirección a otras Comunidades Autónomas
Cuándo empezará el reparto de menores migrantes y qué trabas tendrá: de los avisos de incumplimiento del PP a la falta de datos
El Gobierno de Ceuta (PP), alejado del argumentario de Génova, ha celebrado en la última semana la aprobación de la modificación de la Ley de Extranjería que permitirá reubicar a menores migrantes en situaciones de emergencia como la que vive la ciudad autónoma. El portavoz del Ejecutivo local, Alejandro Ramírez, ha mostrado su rechazo a una posible desobediencia por parte de algunos gobiernos autonómicos liderados por su misma formación: “La ley es la ley y está para cumplirla”, ha dicho el representante ceutí preguntado por elDiario.es sobre si mantienen una postura favorable a la modificación normativa que el PSOE y sus socios de investidura han sacado adelante en el Congreso. “Como ya hemos dicho en más de una ocasión el Grupo Popular de Ceuta está de acuerdo con este Real Decreto”, ha subrayado.
El PP ceutí se posiciona así de nuevo en contra de los postulados de Génova, con un planteamiento más próximo a los socialistas locales y a la Delegación del Gobierno en la ciudad. El secretario general del PSOE de Ceuta, Miguel Ángel Pérez Triano, y la máxima representante del Ejecutivo nacional en la localidad, Cristina Pérez, han afeado el voto en contra a la iniciativa por parte de los populares en el Congreso, especialmente el del diputado ceutí Javier Celaya, del que esperaban una abstención en la votación de la reforma legislativa.
Hace más de un año que la llegada de menores procedentes principalmente de Marruecos se incrementó hasta sobrepasar en más de un 400% las capacidades de la localidad, que tiene las competencias en materia de tutela. Se juntaron varios factores, principalmente la meteorología, con lluvia y niebla, que facilita las tentativas de llegada por vía marítima.
Durante meses se buscó un acuerdo para repartir a los menores desde aquellos territorios que vivan una emergencia humanitaria en relación a la acogida de estos chavales, como la que vive Ceuta y Canarias. En el caso de la primera, la Administración local ha llegado a tener más de 600 niños y adolescentes bajo su amparo, pese a tener una capacidad en tormo a 80 plazas. El entendimiento entre regiones no fue posible en sucesivas conferencias sectoriales y el PP -tanto nacional como sus respectivos gobiernos autonómicos- negó su apoyo a la reforma de la Ley de Extranjería. El presidente de Ceuta, Juan Vivas, pidió en sucesivas ocasiones una solución “estructural” y “equitativa”, que permitiese los traslados por territorios.
Ahora, después del acuerdo con Junts y la convalidación de la reforma por parte del Congreso de los Diputados, el PP de Ceuta no esconde sus valoraciones positivas de la medida. Sin embargo, la oposición de sus compañeros de siglas en el resto de España puede complicar las cosas, a la vista de que varias comunidades autónomas tienen previsto presentar recurso de inconstitucionalidad contra el cambio normativo. “Poco podemos hacer. Cada uno está en su derecho de utilizar los mecanismos que considere oportunos”, comenzó apuntando el portavoz local, que luego desaconsejó que se acuda a la vía judicial “en un tema tan sensible”. El portavoz del Gobierno local incidió en que todos los ejecutivos autonómicos deben cumplir con lo establecido en la norma porque “la ley está para cumplirla”. Además, Ramírez ha deslizado que el reglamento que prepara el Ministerio de Infancia debería blindar el seguimiento de la norma por parte de las comunidades.
La Ciudad Autónoma mira a la sectorial prevista para el próximo 28 de abril, con la expectativa de que, en caso de no haber un acuerdo para el reparto, se proceda de inmediato a la aplicación de la norma modificada. Esto llevaría, según las previsiones locales, a que salgan de Ceuta 400 de los 480 jóvenes que ahora mismo se encuentran en suelo norteafricano. Las autoridades ceutíes esperan que al menos algunos de ellos puedan hacerlo antes de verano.
Aunque tras la reforma legislativa aún no se haya pronunciado personalmente, Juan Vivas, presidente de la Ciudad, ha mantenido siempre una postura clara: “Desde el primer momento, de manera inequívoca, reiterada, insistente y ante distintas instancias, el Gobierno de la Ciudad ha defendido, y sigue defendiendo, dicha reforma”, señaló, por ejemplo, el pasado 23 de diciembre, en un discurso que mostraba su clara oposición a las tesis del PP a nivel nacional. Para Vivas, . Porque se trata, la acogida de menores es “un asunto de todos y de un fenómeno estructural que debe de resolverse entre todos y a través de soluciones estables y duraderas en el tiempo”.
El líder local ha reconocido ese choque de posturas, que suele ser visto como un “verso libre” dentro del PP, presumiendo en sus discursos de “anteponer los intereses de Ceuta y España” a los de cualquier sigla. Estas diferencias se han hecho más patentes a medida que se acentuaba el debate sobre la reubicación de menores y alcanzó su punto álgido de tensión el día en que se anunció el pacto entre PSOE y Junts que desbloqueaba la reforma de la Ley de Extranjería.
En esa jornada, mientras Alberto Núñez Feijóo tachaba de “xenófobo” y “racista” el pacto para distribuir a niños y adolescentes por las distintas regiones del país, el Gobierno ceutí, encabezado por Vivas, enviaba un comunicado a los medios celebrando la medida destinada a acabar con la saturación de los espacios de tutela de la ciudad. Hasta entonces, el presidente ceutí presionó durante meses a Génova para que aceptara negociar con el Ejecutivo de Pedro Sánchez una vía de salida para los jóvenes que llegaban a Ceuta.