“Mi abuelo siempre dice que lo sacaron de la cárcel como si fuera un perro. Ahora teníamos un poco de esperanza en que se acabara esta pesadilla. Pero seguimos en el bache”. Al otro lado del teléfono habla Firdaous Chmorra Tommouhi, nieta de Ahmed Tommouhi, quien a sus 73 años ha recibido esta semana el enésimo golpe de una cadena de negligencias y ninguneo institucional que se remonta a hace décadas. La Audiencia Nacional a este albañil de origen marroquí por los 15 años que pasó en la cárcel por una violación que no cometió.