La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) remite un informe en el que destaca que el Plan de Inundaciones también atribuye al Gobierno valenciano el control de las ramblas con «el servicio de Bomberos Forestales de la Generalitat»
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El Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) no es un sistema de predicción, sino de observación, la información que traslada al Centro de Coordinación de Emergencias (CCE) de la Generalitat Valenciana es complementaria y el seguimiento de ramblas y caudales también compete al Gobierno autonómico, tal y como establece el Plan de Inundaciones.
Estas son algunas de las conclusiones que se extraen del informe que ha remitido la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) al juzgado de Catarroja que investiga la gestión de la DANA. La jueza solicitó la semana pasada documentación relativa al caudal del barranco del Poyo entre las 16.13 y las 18.42 horas de ese día y precise de qué forma se transmitieron.
En su informe, al que ha tenido acceso elDiario.es, la CHJ explica el funcionamiento del SAIH y por qué se trata de una herramienta complementaria que es de utilidad relativa si no va acompañada de recogida de datos sobre el terreno del resto de agentes implicados en el control de cauces y barrancos y de un seguimiento exhaustivo de sus datos desde el CCE. Además, se documenta la actualización de los datos cada cinco minutos de la lluvia registrada en los pluviómetros y del caudal del barranco del Poyo disponible en su web y de los correos de aviso que se enviaron a Emergencias.
Funcionamiento del SAIH
Según el documento, “el SAIH no es un sistema de predicción, es un sistema de observación y, como tal, muestra datos observados en tiempo real”. Para entender su funcionamiento hay que tener en cuenta que “se compone de una compleja estructura de recogida de datos en intervalos de cinco en cinco minutos, puntos de concentración de datos, transmisión de esos datos a la sede de la CHJ, centro de proceso de datos y visualización de las magnitudes meteorológicas e hidrológicas; todo ese proceso supone que desde que se recogen los datos en campo hasta que se visualizan en la aplicación informática media un tiempo de unos 20 a 30 minutos desde su ocurrencia real”.
El sistema, en tanto que sistema automático transmite información de forma continua a intervalos de 5 minutos, además emite dos tipos de avisos a los responsables de protección civil y emergencias: avisos de lluvia mediante el envío de correos electrónicos cuando en el pluviómetro se superan 30 litros por metro cuadrado en 1 hora o 50 en 4 horas, tal y como se recoge en el Plan Especial frente al riesgo de inundaciones de la Generalitat Valenciana; y avisos de caudal tras la validación manual por los técnicos de sala al superarse determinados umbrales, pero a diferencia de los de lluvia, los umbrales son específicos para cada punto de medición. En este punto insiste el informe en que “más allá de los datos del SAIH relacionados con la explotación y la seguridad de presas e infraestructuras hidráulicas del Estado, hay que aclarar que la información y avisos transmitidos por el SAIH es complementaria al resto de información que reciben los Centros de Coordinación de Emergencias y de la que se nutren para la gestión de las emergencias por inundaciones”.
Seguimiento de ramblas y barrancos
El informe pone de relieve que “el seguimiento pluviohidrológico de este tipo de cuencas, debido a la rapidez con la que se generan las crecidas, dado el escaso número de puntos automáticos de control y puesto que no existe posibilidad de laminar los caudales, requiere la participación de diferentes organismos, como se detalla en el Plan Especial de Inundaciones de la Generalitat”. En concreto, además de las confederaciones, están implicados en esta competencia según el citado Plan “los municipios, la Guardia Civil, el servicio de Bomberos Forestales de la Generalitat, la Policía de la Generalitat, agentes medioambientales y recursos adscritos al Servicio de Vigilancia Preventiva frente al riesgo de incendios forestales de la conselleria competente, brigadas de la Diputación de Valencia y comunidades de regantes y servicios del ciclo integral del agua que informarán a Ayuntamientos”.
Además, añade que según el Plan de Inundaciones “para el caso de los barrancos y cuencas menores y en aquellos casos en los que la información sobre la posibilidad de inundaciones proceda de otros Organismos o Servicios, el CCE Generalitat contrastará la información con la Confederación Hidrográfica para determinar el ámbito territorial de afección de la Alerta Hidrológica”.
Por lo tanto, según el informe remitido a la jueza, “en este tipo de cuencas, la CHJ no es quien realiza el seguimiento sino quien, previa petición del CCE, contrasta la información que llega al CCE”. Ese es el motivo por el cual “en algunos barrancos hay puntos de control, que no son estaciones de aforo, sino sensores de nivel que, en un momento dado pueden servir para contrastar la información que debe estar llegando y coordinando el CCE procedente de las fuentes anteriormente citadas”.
Como ha venido informando elDiario.es, Emergencias de la Generalitat envió a los bomberos forestales a hacer seguimiento del barranco del Poyo a mediodía, pero a las 15.00 horas les ordenaron retirarse a la base.
El SAIH en el barranco del Poyo
Teniendo en cuenta las características de la cuenca del Poyo, prosigue el informe, “la funcionalidad del SAIH y el propio Plan Especial de Inundaciones, no se puede confiar la seguridad de las personas ante una emergencia por inundaciones, a los datos de caudal de un simple sensor de nivel, que no recoge toda la información hidrológica de la cuenca y donde, en todo caso, el tiempo de reacción para la población es muy bajo”. La gestión de inundaciones en este tipo de cuencas requiere “de una mayor anticipación, para lo cual sirve la información pluviométrica, pero sobre todo ha de servir la predicción meteorológica”.
Los datos de pluviometría de los que dispone la CHJ que pueden tener influencia en la cuenca del Poyo “son los que se ubican dentro de la propia cuenca y los contiguos, es decir, los pluviómetros de Chiva, Siete Aguas, Real de Montroy, Rambla del Poyo NIII, Picassent, Repartiment, La Presa, Vilamarxant, Bugarra y Buseo”
En cuanto a caudales en la cuenca “únicamente se dispone de un sensor que registra información de nivel, a partir de la cual se realiza una estimación del caudal circulante, que está ubicado en la rambla del Poyo en el cruce con la Autovía del Mediterráneo (A-3)”.
El documento adjunta los datos de pluviometría mostrados en la Web del SAIH entre las 16.00 y las 18.45 hotas, así como los 16 correos electrónicos entre las 16.13 y las 18.42 horas referentes a la superación de umbrales de lluvia.
Datos del caudal del barranco del Poyo
El informe insiste en que “el SAIH dispone de un único punto de control automático de caudal ubicado en su cruce con la A-3” y en que “el dato obtenido en ese punto no es representativo del caudal del Barranco del Poyo en todo su recorrido, ya que confluyen diferentes afluentes aguas abajo” y añade: “Por la forma en la que se produjeron las lluvias (del Este hacia el Oeste), la parte sur de la cuenca (barrancos de Gallego, Santo Domingo, Pelos, Horteta…), que escapa al control del sensor SAIH, es la que primero generó la crecida que comenzó a inundar Paiporta antes incluso de que dicho sensor comenzara a registrar una crecida importante. Recordamos que el récord de lluvia registrado en el pluviómetro de AEMET en Turis (185 l/m2 en una hora entre las 15:30 y las 16:30 horas del 29 de octubre de 2024), alimenta a estos barrancos del sur de la cuenca del Barranco del Poyo”.
En informe detalla los datos publicados en la web del SAIH en el periodo establecido de 16.00 a 18.45 horas, en el supuesto apagón informativo denunciado por el PP. De acuerdo con los datos registrados a partir de las 17.40 horas se produjo un incremento súbito de caudal. “Los datos de esta subida tan abrupta estuvieron disponibles en el CPC entre las 18.00 y las 18.10 horas”, es decir, dos horas antes del envío del SMS masivo a la población, que además se mandó por la situación de riesgo de la presa Forata.
El informe remitido a la jueza pone de manifiesto de nuevo que “aunque los datos cincominutales estuvieron disponibles en todo momento en la web del SAIH, los técnicos de la sala SAIH enviaron de manera redundante un correo electrónico al CCE una vez validada y comprobada la información sobre el aumento de cauda”l. Este correo electrónico al CCE se envió las 18.43 y además del dato de caudal, se incluyó también la advertencia de que la subida estaba siendo “muy rápida”. Así, “al margen de la publicación de los datos en la web del SAIH, se enviaron los siguientes correos electrónicos entre las 16.13 y a las 18.43 horas”.