Feijóo lamenta que Pedro Sánchez se reúna de emergencia con los líderes europeos sin consensuar una posición que ni él ni sus portavoces quieren definir, mientras arremete contra las declaraciones del presidente sobre el mandatario de EEUU
El PP se divide ante la llegada de Trump mientras Feijóo guarda silencio
¿Qué opina el PP sobre las negociaciones entre Donald Trump y Vladimir Putin para acabar con la guerra de Ucrania sin tener en cuenta al país invadido ni a la UE? ¿Qué haría Alberto Núñez Feijóo si fuera presidente con los aranceles a determinados productos europeos, incluidos los de España, que ha aprobado el presidente de EEUU? ¿Apoyará el PP al Gobierno si aumenta el gasto en Defensa para alcanzar el nivel exigido por la OTAN? Son preguntas que no tienen respuesta del principal partido de la oposición, que ha optado por la indefinición absoluta ante el terremoto geopolítico provocado por el segundo advenimiento de Trump. Mientras, Santiago Abascal se ha alineado con el presidente estadounidense.
El líder del PP se pronunció con las siguientes palabras este lunes por la mañana en una entrevista en El Mundo: “España tiene que defender los intereses de los españoles, no los intereses electorales del Gobierno o un postureo que te dé unos votos. Y tiene que llevarse bien con el Gobierno norteamericano, con independencia de quién esté en él. Ahora bien, España no puede quedarse de brazos cruzados cuando se afecta a sus sectores productivos, y además, de forma injusta. España debe tener una posición común con la UE, porque solo desde la UE podemos hablar de tú a tú a EEUU”. Feijóo añadió: “Debe sentarse, dialogar, negociar… y levantarse la última de la mesa. La UE no puede cruzarse de brazos si no se llega a un punto de consenso y de equilibrio”.
Estas son las respuestas más precisas que ha dado Feijóo desde que el pasado 20 de enero Trump regresó oficialmente al Despacho Oval, desde donde ha abierto negociaciones con Rusia para acabar con la guerra de Ucrania mientras abre otra comercial con medio mundo, incluida Europa.
El líder del PP tiene como estrategia habitual no tomar posición sobre una materia salvo que sea absolutamente imprescindible. Ocurre con el SMI, por ejemplo, ante el que Feijóo mantiene un doble discurso. Es un intento de no dar ventaja a sus rivales políticos y de poder modularla ‘a posteriori’ en función del resultado y de su propia conveniencia. Y siempre para poder atacar al Gobierno, ya sea en España o en Europa. Feijóo continúa en su respuesta a El Mundo: “El insulto, el exabrupto y la descalificación no llevan a nada. Por eso los líderes europeos son muy prudentes en su relación con Trump. El más imprudente es el español, que insiste y persiste en la confrontación. Es un irresponsable”.
Este mismo fin de semana los presidentes de Alemania y Francia, Frank Scholz y Emmanuel Macron, respectivamente, replicaron al discurso del vicepresidente de EEUU, James David Vance. El alemán calificó de “inaceptables” las injerencias del enviado de Trump a la conferencia de Múnich, donde pidió levantar el cordón sanitario a los neonazis. “No aceptaremos que extraños intervengan en nuestra democracia”, dijo. Su rival por la Cancillería, Friedrich Merz, también pidió “respeto” por el sistema electoral alemán.
Merz es el líder de la CDU alemana, partido hermanado con el PP español. También pertenece a la misma familia política el polaco Donald Tusk, quien ya arremetió con dureza contra los pactos de la derecha española con la ultraderecha de Vox. Tusk calificó de “guerra comercial estúpida” los aranceles unilaterales impuestos por Trump, cuyas decisiones son, dijo, “arbitrarias e injustas”. Con todos ellos se reunirá este martes Feijóo en una reunión extraordinaria por videoconferencia de los líderes del PPE. El jefe de la oposición española atenderá a la cita desde Murcia, donde visitará la empresa hortofrutícola García Aranda, S.L.
Enfrentamientos en el PP
La falta de posicionamiento del presidente del PP hace que los demás dirigentes y portavoces no tengan una línea clara que seguir, lo que da lugar a enfrentamientos y diferencias estratégicas cuando cada uno da su opinión. Ocurrió entre dos de los principales dirigentes del PP de Feijóo, Esteban González Pons y Miguel Tellado. El vicesecretario de Institucional es el responsable de la política internacional del partido desde su puesto de vicepresidente del PP europeo y del propio Parlamento comunitario. Pons firmó un duro artículo en el que tildaba a Trump de “ogro naranja” y de “macho alfa de una manada de gorilas”.
La réplica le llegó por boca de un compañero de Comité de Dirección, mano derecha de Feijóo en el Congreso y hombre para todo del líder del PP a nivel interno. “No comparto la opinión de González Pons sobre Trump. Es su opinión personal en un artículo, pero no la comparto”, le dijo a Ok Diario. Eso sí, sin añadir cuál es su opinión. “Hay cosas en las que podemos coincidir con Donald Trump y otras en las que no”, zanjó.
“No es el criterio del PP, las ha hecho a título particular”, dijo el responsable de Política Autonómica, Elías Bendodo. El artículo de Pons no obtuvo respuesta en Génova. “Nada que decir”, se limitaron a responder los portavoces del PP. Sí respondió Santiago Abascal. El líder del Vox se ha convertido en el principal defensor de las políticas de Trump, incluso de aquellas que suponen un peligro cierto para el comercio exterior español después de que el presidente de EEUU haya aprobado cargar con un 21% de aranceles a una lista desconocida de productos.
Abascal aprovechó la sesión de control al Gobierno para culpar a Pedro Sánchez de los aranceles de Trump. Dijo también que Italia se iba a salvar porque Giorgia Meloni se lleva bien con el presidente de EEUU. Después se puso a sí mismo en el mismo equipo. Trump no solo ha firmado contra España, sino contra toda Europa, aunque todavía no se conoce la lista de productos. Además, ha incluido a buena parte del mundo. También la Argentina de Javier Milei, quien presume, como Abascal, de amistad con el mandatario estadounidense.
Ayuso condecora a Milei
Más cerca de Abascal que de Feijóo parece también Isabel Díaz Ayuso, quien despreció la opinión de su vicesecretario: “Lo que me faltaba ya como presidenta del PP de Madrid es valorar lo que diga Pons”. Ayuso condecoró a Milei en un acto al que no invitó a Feijóo, y Abascal ha defendido con todo al presidente argentino, implicado en una estafa masiva al hacer propaganda de una criptomoneda que resultó ser un engaño. “Milei es la esperanza del continente. Está demostrando que se puede sacar a Argentina de la ruina”, dijo hace un par de semanas Miguel Tellado.
Pero ninguno de ellos ofrece una respuesta cuando se pregunta cómo actuarían en caso de estar en el Gobierno. En plena bronca por el artículo de Pons la relación de España con EEUU debería ser “siempre excelente” y “constructiva”, sin mencionar directamente la polémica que han suscitado las palabras de su dirigente, y culpando al presidente del Ejecutivo de enturbiarla. “Ese es el camino que yo utilizaré si tengo la responsabilidad de presidir el Gobierno, y lamento que Sánchez esté haciendo lo contrario”, zanjó.
Este lunes, el portavoz nacional, Borja Sémper, tampoco resolvió las dudas. Eso sí, atacó al presidente del Gobierno español. “Antes de saber qué va a hacer la UE, nos preocupa qué va a hacer España”, dijo. “España es una fuente de desconfianza en política exterior y de Defensa gracias a Pedro Sánchez”, añadió.
Sémper lamentó en nombre de su jefe que Sánchez no le haya consultado la posición española antes de asistir este mismo lunes a la cumbre extraordinaria de París. Según el portavoz del PP, “Europa puede y debe hacer más por su propia seguridad sin perder de vista que EEUU es un aliado imprescindible y estratégico”. Pidió tener las “mejores relaciones con EEUU” y, a la vez, “no callar cuando nuestros sectores productivos están en riesgo”. “Ni insultamos ni nos negamos a hablar”, zanjó. Una frase que resume perfectamente la posición del PP.
