El presidente de Mercadona reconoce que le preocupa la crisis reputacional que la gestión de la tragedia puede haberle provocado a la Comunitat Valenciana y a España: «A partir del día 30, las administraciones podían haber hecho muchas cosas»
La jueza de la DANA destroza la versión de Mazón sobre la respuesta a la catástrofe y apuntala la “negligencia”
“Una catástrofe natural descomunal con unos efectos devastadores y unos daños materiales y morales que afectaron a más de un millón de personas”. Así ha descrito este martes el presidente de Mercadona, Juan Roig, la DANA del pasado 29 de octubre que asoló gran parte de la provincia de Valencia: “Ahora tenemos que analizar lo que pasó después del 30 de octubre”.
Juan Roig ha reconocido que le preocupa la crisis reputacional que puede haber provocado la gestión de la tragedia, no sólo a la Comunitat Valenciana sino “a España”, por esa “falta de agilidad” en la respuesta de las administraciones: “Nos hubiera gustado que con los impuestos que pagamos se hubiera gestionado mucho mejor”.
El empresario, quien ha insistido en que la DANA fue “una catástrofe natural que nadie esperaba” y no ha querido valorar la causa judicial –la jueza que investiga las consecuencias de las inundaciones de octubre ha imputado a la exconsellera de Interior y Justicia Salomé Pradas-, ha insistido a que a partir del día 30 “se podían haber hecho muchas cosas, pero ninguna administración actuó”.
“Los primeros cuatro días (tras las inundaciones) fueron nefastos; nos sentimos desamparados, porque todo era un desierto en el que solo aparecimos algunas empresas y muchísimos voluntarios”, ha sentenciado el presidente de Mercadona, quien se ha mostrado muy crítico con la respuesta de la Administración: “Como sociedad, pagamos nuestros impuestos, pero no vimos ni agilidad en la respuesta ni coordinación”. “Ha fallado la gestión de todas las administraciones públicas”, ha insistido, para lamentar posteriormente: “Lo peor de todo es que no hay un plan conjunto de futuro, lo único que hacen es pelearse entre ellos”.
“Era difícil la respuesta, pero para eso pagamos nuestros impuestos”, ha insistido el empresario valenciano, quien se ha lamentado de que, “si mañana tuviéramos otra DANA, los efectos devastadores serían los mismos”.
“Ha sido un año especialmente duro para nosotros, con los incendios del norte de Portugal y las inundaciones de la DANA en Valencia”, ha dicho Roig, quien ha querido tener un recuerdo para las 227 personas fallecidas a causa de las inundaciones del pasado mes de octubre (tres de ellas, todavía permanecen desaparecidas), y ha tenido una mención especial para “los cuatro grandes empresarios que perdieron la vida”.
Reacción de la empresa a las inundaciones
El presidente de Mercadona ha querido destacar la respuesta de los trabajadores: “Las inundaciones afectaron a 21 tiendas en la zona cero, y el día 30 de octubre empezamos con la reconstrucción”. Roig ha tenido palabras de agradecimiento a la sociedad, “es una satisfacción que esté tan comprometida”, y especialmente para con los voluntarios, que a nosotros también nos ayudaron“.
“En dos, tres o cuatro días ya habían abierto la mitad de las tiendas”, ha explicado Roig, quien ha apuntado que la última se abrió el pasado 14 de enero en Catarroja. Además, se inundó el bloque logístico de Riba-roja y han tenido que derribar el bloque de congelados: “Hemos sufrido las consecuencias de la DANA, como muchísimos valencianos que no han tenido la capacidad y los medios que tenemos nosotros”.